REACCIÓN TARDÍACA
El rostro es una máscara
difícil de leer
no sólo si callamos
sino cuando, y sin vueltas,
charlamos. Te sentiste
inquieta de repente:
"¿estás ahí?". Mirame
en estos versos, tibios
en apariencia: anoto
mi rostro para vos,
su interior, como dócil
respuesta a tu pregunta.
Fatigado, quería
contemplarte; recién
ahora sé qué pude
decirte: "mariposas
palpitantes tu escote".
No hay comentarios.:
Publicar un comentario